La oficina de la Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU-DH) y la Entidad de la Naciones Unidas para la Igualdad ...
La oficina de la Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU-DH) y la Entidad de la Naciones Unidas para la Igualdad de Género y el Empoderamiento de las Mujeres (ONU Mujeres) exigieron el esclarecimiento de los asesinatos de las periodistas Yessenia Mollinedo Falconi y Sheila Johana García Olivera, acribilladas en el estacionamiento de una tienda de conveniencia en Cosoleacaque, Veracruz.
En los primeros cinco meses de este año, la ONU-DH ha documentado el asesinato de nueve periodistas y un trabajador de los medios comunicación, hechos vinculados a “las actividades de periodísticas de las víctimas y las agresiones sufridas”, en tanto que al cierre de 2021 la contabilidad del organismo registró ocho periodistas y dos guardias de comunicación asesinados y otros dos periodistas desaparecidos.
Al condenar el doble crimen ocurrido el lunes 9 de mayo, los organismos internacionales recordaron que los hechos ocurrieron a unos días del asesinato del periodista Luis Enrique Ramírez Ramos en Culiacán, Sinaloa, el representante de ONU-DH, Guillermo Fernández-Maldonado consideró que la acumulación de tres agresiones fatales contra periodistas en menos de una semana, “genera consternación y honda preocupación, pues refleja la gravedad del contexto de inseguridad y violencia en la que deben realizar su importante trabajo las personas periodistas en México”.
El representante consideró que estos hechos constituyen “un urgente recordatorio de la importancia que las autoridades adopten medidas oportunas y efectivas para cumplir con su obligación de garantizar la protección y seguridad de las personas que ejercen el periodismo frente a cualquier posible amenaza, amedrentamiento o agresión”.
Aunado a ello, el doble asesinato de las mujeres periodistas en Veracruz, “recuerda que es fundamental integrar una perspectiva de género tanto en la investigación judicial como en las medidas de protección, teniendo en cuenta la violencia estructural de género y la menor visibilidad de los riesgos que enfrentan las periodistas por ser mujeres”, puntualizó Fernández-Maldonado.
El representante insistió en la “vital importancia que tiene poner fin a la extendida impunidad sobre los autores materiales e intelectuales de los atentados contra periodistas, pues la ausencia de identificación y sanción de los criminales favorece la reiteración de los violentos ataques”.
Fernández Maldonado insistió en la urgencia de “redoblar esfuerzos articulados en le nivel federal y local para adoptar de manera coordinada medidas preventivas y de investigación, capaces de crear un ambiente adecuado para que las personas que ejercen el periodismo en el país, lo hagan en plena libertad y seguridad”.
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