En ocho meses y medio de 2021, autoridades ministeriales han contabilizado 245 cadáveres en 18 fosas clandestinas ubicadas en el estado de ...
En ocho meses y medio de 2021, autoridades ministeriales han contabilizado 245 cadáveres en 18 fosas clandestinas ubicadas en el estado de Jalisco.
Blanca Jacqueline Trujillo Cuevas, fiscal Especial en Personas Desaparecidas de la entidad, reportó que los cuerpos fueron recuperados de diversos municipios y siguen labores para identificar a poco más de 100 víctimas.
“Actualmente ya están identificados un poco más del 50% de estos cuerpos y seguiremos trabajando para saber su identidad y llevarlos hacia sus familiares”, aseguró la funcionaria en una rueda de prensa encabezada por el fiscal de Jalisco, Gerardo Octavio Solís Gómez.
La fiscal destacó que actualmente se realizan diligencias para procesar una fosa clandestina, aunque no precisó en qué municipio.
Solís Gómez agregó que han concluido trabajos de búsqueda en un predio de Acatitlán, en Tlajomulco de Zúñiga, donde se obtuvieron 18 bolsas con restos humanos. La zona fue procesada y las partes localizadas fueron enviadas al Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses para su análisis.
“En el lugar se descartó la existencia de más punto de inhumación clandestina”, aseguró la dependencia.
Al respecto, el fiscal reiteró que los grupos criminales no solo cometen estas atrocidades, sino que en ocasiones depositan los restos en diferentes fosas.
Así sucedió con el joven Javier Ángel Jara, de quien sus familiares reclamaron no haber recibido el cuerpo completo y había suspicacias de que los restos se hubiesen perdido en instalaciones forenses.
“Trabajamos en una gran cantidad de fosas en el estado y en varias ocasiones al menos sí se ha presentado esta situación, de que hemos encontrado partes en diferente fosa.
“Son circunstancias que, desde luego, el crimen organizado seguramente disponen de diferente manera en ese momento de los segmentos, pero no es usual, no es en repetidas ocasiones, pero sí nos ha sucedido”, respondió el fiscal y aseguró que los peritos están preparados para enfrentar esas situaciones.
Jalisco es uno de los estados con mayores índices de personas desaparecidas en México. Tan solo Tlajomulco, el Salto, Zapopan y Tlaquepaque suman 727 cuerpos recuperados de los 1,315 contabilizados en los municipios con mayores casos entre diciembre de 2018 y junio de 2021.
Esto significa que el estado concentra la mitad (55.2%) de los cadáveres entre las alcaldías con más víctimas registradas en el país y en el periodo que corresponde al gobierno de Enrique Alfaro, según datos de la Secretaría de Gobernación.
Además, la entidad encabeza la lista con más personas desaparecidas en los últimos dos años y medio con tres mil 948 reportes. Esto representó el 18.32% de las denuncias a nivel nacional.
En contraste, las autoridades federales apenas han coadyuvado en 36 acciones de búsqueda en campo en el estado, entre el 8 de febrero de 2019 al 30 de junio del año en curso.
Hasta marzo pasado, parte de las fosas clandestinas y crisis de desapariciones se explicaban por la disputa territorial que mantenía Carlos Enrique Sánchez Martínez, el Cholo, contra sus antiguos aliados del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), grupo dominante en la entidad y de alcance transnacional.
Sánchez Martínez confesó haber desatado una ola de asesinatos para “calentar la plaza”, al tiempo que depositaba los cuerpos en depósitos clandestinos. El Cholo, líder del Cártel Nueva Plaza, fue ejecutado por miembros del CJNG en represalia por la masacre de 11 albañiles en Tonalá, pero antes fue obligado a revelar sus presuntos crímenes en un video.
Lejos de rechazar los señalamientos, las autoridades consideraron que aquellas confesiones serían integradas en una carpeta de investigación para determinar el plan de desestabilización social y esclarecer la crisis de violencia en Jalisco.
Pero cada vez son descubiertos más puntos de inhumación debido al contexto de narcoguerra que vive la entidad como otras regiones del país.
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