La fiscal general Pam Bondi confirmó este lunes ante el Congreso que el Departamento de Justicia (DOJ) se encuentra en “alta alerta” debid...
La fiscal general Pam Bondi confirmó este lunes ante el Congreso que el Departamento de Justicia (DOJ) se encuentra en “alta alerta” debido a la presencia de iraníes que ingresaron ilegalmente a EE.UU., tras el incremento de tensiones con Irán.
Durante una audiencia presupuestaria, Bondi señaló que se monitorea de cerca a más de 1,000 ciudadanos iraníes que cruzaron durante la administración de Biden. Según cifras de la Patrulla Fronteriza, 1,504 iraníes fueron detenidos en la frontera sur; de ellos, 729 fueron liberados dentro del país.
Estas declaraciones coinciden con una advertencia del Departamento de Seguridad Nacional, que considera que el conflicto con Irán ha creado un “entorno de amenaza elevado”, advirtiendo sobre posibles ciberataques, antisemitismo y llamados a la violencia por parte de líderes iraníes.
Consultada por el representante Tony Gonzales sobre la existencia de posibles “células durmientes” iraníes, Bondi evitó responder públicamente. El trasfondo: EE.UU. llevó a cabo bombardeos contra instalaciones nucleares iraníes, lo que desencadenó una respuesta misilística de Irán contra una base militar estadounidense en Qatar. Aunque no hubo víctimas, la escalada mantiene en vilo a la seguridad nacional.
Como antecedente, el DOJ presentó una acusación el año pasado contra tres hombres vinculados a un complot iraní para asesinar a Donald Trump y a una periodista crítica del régimen. Uno de los acusados permanece prófugo.
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