La Fiscalía de Barcelona solicitó este viernes una pena de ocho años y dos meses de prisión y una multa de 23.8 millones de euros para la ca...
La Fiscalía de Barcelona solicitó este viernes una pena de ocho años y dos meses de prisión y una multa de 23.8 millones de euros para la cantante Shakira, a la que acusa por un presunto fraude fiscal de 14.5 millones de euros.
El escrito de acusación del Ministerio Público se presentó en el juzgado de instrucción número dos de Espluges de Llobregat (Barcelona), luego de que la artista colombiana rechazara el miércoles la última oferta que le hizo la fiscalía para alcanzar un acuerdo que rebajaba las penas con tal de evitar el juicio.
El escrito del Ministerio Público acusa a la cantante de simular no residir en España y utilizar un entramado de empresas en paraísos fiscales para ocultar sus ingresos.
Reclama, adicionalmente, se le imponga una multa de 23 millones de euros.
La colombiana ha devuelto los 14.5 millones de euros que exigía la Agencia Tributaria y otros tres de intereses, lo que no impedirá que la artista se siente en el banquillo del tribunal.
Shakira está sujeta a este procedimiento en los tribunales a raíz de una querella que la Fiscalía de Barcelona presentó contra ella por seis delitos contra la Hacienda pública.
Estas acusaciones aseguran que la artista permaneció de manera efectiva en España donde había adquirido una vivienda con su entonces pareja sentimental, el futbolista Gerard Piqué, la mayor parte del tiempo.
De acuerdo a esa información, vivió 242 días en 2012, 212 días en 2014 y 243 en 2014.
Las ausencias de España eran exclusivamente para atender compromisos profesionales y de ocio: 124 días en 2012, 153 días en 2013 y 122 días en 2014.
El escrito de la Fiscalía señala que “estas ausencias conforme a lo dispuesto en la Ley General Tributaria, deben calificarse de esporádicas y deben computarse para el cálculo de más de 183 días de permanencia en territorio español para adquirir la condición de residente habitual en territorio español y la condición de obligado tributario y residente fiscal”, señala.
En el escrito se describe el entramado de sociedades fantasma de la cantante, utilizado “con el deseo de no tributar”, red de empresas que había sido creado años atrás y se sirvió de ella en los tres ejercicios mencionados para ocultar a la Agencia Tributaria “la renta percibida y a la Agencia Tributaria de Cataluña el patrimonio que tenía”, haciendo aparecer como si los titulares de sus percepciones y patrimonio fuera de las sociedades y no de ella misma.
Los ingresos de la popular artista proceden de su actividad artística como los que obtuvo por publicidad, carecieron de medios materiales y personales para realizar actividad alguna y los gastos que generaron fueron los puramente administrativos, llevados por despachos especializados en este tipo de estructuras.
La red de sociedades tienen sede en Islas Vírgenes Británicas, Islas Caimán, Malta, Panamá y Luxemburgo.
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