La inflación hará crecer la pobreza en México entre 1.3 puntos y 2.3 puntos porcentuales este año con respecto a 2021, estimó este lunes la ...
La inflación hará crecer la pobreza en México entre 1.3 puntos y 2.3 puntos porcentuales este año con respecto a 2021, estimó este lunes la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) al presentar un estudio sobre el impacto de la guerra en Ucrania en la región.
El director de la División de Estadísticas de la Cepal, Rolando Ocampo, dijo que si la inflación en México mantiene los niveles que tenía hasta marzo pasado –7.48% anualizada--, la pobreza aumentará en 1.3 puntos porcentuales con respecto la de 2021 y llegará a 36.2%. Esto significa que 1.3 millones de personas se sumarán a esa condición.
Sin embargo, si la inflación se eleva en 2 puntos, el número de mexicanos que pasarán a la pobreza este año será de 2.5 millones y ese indicador llegará a 37.2%, que estaría entre los más altos de América Latina.
Ocampo dijo esto obedece a la inflación, en general, y al impacto que esta tiene en los precios de los alimentos.
Por eso, explicó, la Cepal anticipa un alza “sustantiva, fuerte” de la pobreza y la pobreza extrema en México, Brasil, Colombia y Paraguay, mientras que en Bolivia y Panamá los índices incluso pueden disminuir.
Al presentar el informe “Repercusiones en América Latina y el Caribe de la guerra en Ucrania: ¿Cómo enfrentar esta nueva crisis?”, el secretario ejecutivo interino de la Cepal, Mario Cimoli, dijo que, a nivel regional, la pobreza aumentará en 0.7 puntos con respecto a 2021 y llegará a 33.7%, mientras que la pobreza extrema se ubicará en 14.9%, 0.7 puntos más.
Esto se debe a la inflación y a que la región enfrenta contextos internos caracterizados por una fuerte desaceleración económica y una lenta e incompleta recuperación de los mercados laborales, lo llevará a 7.8 millones de latinoamericanos a sumarse a los 86.4 millones cuya seguridad alimentaria ya está en riesgo.
De acuerdo con Cimoli, los efectos de la guerra en Ucrania en la región no deben ser vistos como un fenómeno aislado sino como la suma de varias crisis como la financiera de 2008-2009, las tensiones económicas entre Estados Unidos y China y la pandemia del covid-19.
Esto llevará a América Latina a entrar a una fase de bajo crecimiento que podría prolongarse por años, dijo, aunque explicó que en la inflación ya se observa un cambio de tendencia, hacia la baja, lo que hace prever que en 2023 será menor que la de este año.
La Cepal mantiene la expectativa de crecimiento para este año en México en 1.7%.
Cimoli señaló que la inflación es un factor que aceleró la guerra en Ucrania y que gravita de manera negativa en el crecimiento económico en la pobreza, pues el quintil más pobre de la población latinoamericana es el que más la padece, con un impacto de 8.3% anual, mientras que en el quintil más rico el índice es de 7.3%.
De acuerdo con el secretario ejecutivo interino del organismo de Naciones Unidas, el impacto en la región del conflicto en Ucrania no es directo, sino por el efecto que este produce en los mercados mundiales porque en 2020 solo el 0.6% de las exportaciones latinoamericanas se dirigieron a Rusia o a Ucrania, mientras que el 0.6% de las importaciones regionales provino de esos dos países.
El estudio de la Cepal indica que los mayores precios de las materias primas, el aumento de los costos de transporte y las perturbaciones en las cadenas internacionales de suministro impactarán las exportaciones de bienes de Latinoamérica este año.
En diciembre de 2021, el organismo proyectaba un aumento del 10% del valor de las exportaciones regionales de bienes y del 9% del valor de las importaciones. Sin embargo, el alza de los precios de varios de los principales productos que la región comercializa eleva la proyección para 2022 a una expansión del 23% tanto de las exportaciones como de las importaciones.
Cimoli dijo que para responder a la coyuntura y dinamizar un crecimiento sostenible e inclusivo se requerirán políticas fiscales y monetarias procrecimiento, por lo que los países deberían pensar en reformas tributarias que aumenten los ingresos públicos.
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